viernes, 30 de enero de 2015

Si todo fuera más fácil







Hoy me encontré con este texto que escribí hace algunos meses atrás y me transportó a ese momento, a la fuerza de ese sentimiento y esta vez quiero depositarlo...

No sé como terminé aquí mirando al mar, pero esta vez con ojos de ausencia y desvelo, tratando de buscarte, queriendo desaparecer cada ola,  cada rugido, cada partícula de agua que lo vuelve infinito. Y es que quizá sigo pidiéndole que acorte las distancias, que me abrace hasta a ti y me deposite dentro de tus ansiedades para calmar mis frustraciones, para calmarnos los amores.

Me paro aquí y sigo mirándolo y sigo deseando que los aires que lo dibujan, también me dibujen entre tus alas y así continuar con nuestro vuelo, con nuestras ganas, con nuestros miedos, con nuestro amor. Porque ha llegado quizá la hora de demostrarle a este pedazo de vida azul infinita toda la fascinación que le tengo, que preludio, que le canto, que grito. Y es que es así, amo mis mares, pero ahora, ahora me separan de ti y le pone pausa a nuestra historia: mi favorita. Ahora enaltece la profundidad de mis suspiros, de mi sentir. Ahora pone a prueba mi calamidad, mi destino.

Puede que tenga celos de nosotros. Puede que crea que lo he cambiado. Puede que se sienta traicionado. Puede que me grite, pregunte y llore. Puede que quiera separarnos y también le devuelva la mirada a su marea, que le desvista la brisa, que le acaricie la arena, que me hunda entre sus sales, que le bese la vida... ¿Porque amor mío, y si fuera todo más fácil,  ¿volarías conmigo?…

Scarlet.