sábado, 9 de noviembre de 2019

Los ciclos no se cierran



Nada nunca se acaba. El sol sale y saldrá una y otra vez, aunque a veces se esconda. Es un ciclo y los ciclos nunca se "cierran" por eso son ciclos. Son parte de la naturaleza misma. El movimiento es su única constante, pero nunca lo será su final. Los finales van en contra de su ritmo y naturaleza divina.
En lugar de intentar "cerrar" ciclos. Más bien, deberíamos aprender a movernos con ellos.
Y pues nada. Letras y pensamientos que vuelan una noche como estas.


-Scarlet-

Ya mejor quédate





Vienes y vas, me pregunto hasta dónde llegarás. Respuestas, esperanza, confusión, claridad, amor, apego, sueños; todos bailan y forman parte del mismo círculo; de la misma danza. Me quiero apartar, pero tu musicalidad sigue llamándome y yo mientras continuo bailando el mismo vals.

Las letras vuelven a correr, y yo solo las veo pasar.

-Scarlet-

Tus manos



Las manos que sienten, las manos que tocan, las manos que te envían energía y la hacen llegar hasta tu corazón. Movimientos, trazos, toques que pueden ocupar un espacio en tu memoria poética. Manos que viven, comunican, aman, crean y destruyen las ganas de dejar las tuyas. 


-Scarlet-

Así como estás






Deja de luchar contra quién eres. Voltéate a ver sin juicios ni definiciones. Eres lo que eres. Nada más. Reposa en la simplicidad de tu ser. No hay nada que forzar ni demostrar. Solo déjate así como estás.

-Scarlet-